Rallye de Tierra de Palma del Río

El nacional de tierra daba su pistoletazo de salida el pasado fin de semana con un formato completamente nuevo al unirse los Todo Terreno, y que ha resultado ser algo problemático por las complicaciones que climatológicas. Finalmente la prueba salía adelante, con un recorrido muy recortado, y con una fuerte preocupación por parte de los participantes por como quedaría la especial tras el paso de los Todo Terreno en la segunda pasada, algo que finalmente no dio demasiados quebraderos de cabeza, al menos a los primeros clasificados.

El nuevo formato estrenado en Palma del Río iba a llevar a la prueba a disputarse entre el sábado y el domingo. El sábado solo debía disputarse una pequeña superespecial, mientras que el domingo se llevaría a cabo el grueso del rallye. Las fuertes lluvias caídas durante la semana, y el mismo sábado, iban a dejar el terreno muy complicado, y a provocar que un río que debía cruzarse durante la especial, tuviese unos nada despreciables 80 centímetros de profundidad, que hacían imposible cruzarlo, al menos para los turismos. Los reconocimientos se iban a suspender, y el sábado a las 13.30 horas se reunían los equipos con la organización para tomar una decisión.

Finalmente, la decisión tomada era realizar tan solo los 15 primeros kilómetros del tramo, manteniendo los horarios previstos, y utilizando una salida que había a mitad del tramo como enlace hacia la asistencia. Los reconocimientos se programaban de nuevo a las 15.30, y se permitía utilizar el coche de competición para los mismos. Esto no convencía a algunos pilotos que aseguraban que el piso estaba impracticable, y que preferían volverse a casa, como por ejemplo hacían Alex Villanueva o Carlos Aldecoa. Otros realizaban los reconocimientos a la espera del briefing de pilotos, que se realizaba a las 17.00, donde finalmente se tomaba la decisión de correr, a pesar de las dudas de los pilotos sobre la seguridad.

En todo caso, la superespecial iba a quedar anulada para el nacional de tierra, y la organización preparaba una pequeña ceremonia de salida in extremis para los pilotos. Además, lanzaba una previsión meteorológica esperanzadora, diciendo que no llovería desde las 20.00 horas del sábado hasta las 18.00 horas del domingo, algo que finalmente iba a cumplirse, permitiendo la disputa del rallye sin excesivos problemas.

Ya el domingo, el rallye comenzaba con la primera pasada por el tramo, donde todos los pilotos se mostraban precavidos. Oscar Fuertes era el más rápido, seguido por el gallego Amador Vidal, que ya desde los primeros kilómetros del tramo iba a sufrir problemas mecánicos debidos precisamente al agua. Con el motor en tres cilindros, Vidal completaba el tramo a 12 segundos del madrileño, pero iba a verse obligado a abandonar al ver como un pistón de su motor se había “inundado”. Juan Pablo Castro se situaba tercero en esta primera pasada, seguido por Joan Font, que sorprendía a propios y extraños con su Grupo N, mientras que Xavi Taña era quinto, aquejado de algunos problemas en los reglajes de la suspensión delantera, demasiado dura según parecía para el terreno.

La segunda pasada por el tramo iba a ser en la que Oscar Fuertes daba el do de pecho, mejorando en 32 segundos su crono anterior, lo que le permitía aventajar en más de un minuto y medio al segundo clasificado de la general, y del tramo, que era Juan Pablo Castro con su Subaru Impreza. La emoción se centraba ahora en la pelea por el tercer escalón del podio entre Joan Font y Xavi Taña. Font era quien ocupaba ese tercer puesto por el momento, pero Taña estaba a solo un segundo, a pesar de continuar con problemas en la amortiguación. Pero el piloto de MC Racing iba a descubrir en la asistencia que sus problemas no eran los reglajes, si no el bloqueo de sus amortiguadores debido al barro, algo que podían solucionar sin problemas en la asistencia, con vistas a luchar a brazo partido con Font por la tercera plaza.

Ya con los problemas solucionados, Xavi Taña atacaba a fondo, logrando marcar el scracth en la tercera y última pasada por el tramo cronometrado, seguido de Joan Font, que cedía dos segundos, y con ellos el tercer escalón del podio, que iba a parar a manos de Taña. Oscar Fuertes se tomaba la última pasada con calma, asegurándose la victoria, mientras que Juan Pablo Castro hacía lo propio, firmando así la segunda posición de esta primera prueba de la temporada.

Dos Ruedas Motrices

Si en la general, la lucha fue por el tercer escalón del podio, en la categoría de dos ruedas motrices, la lucha iba a ser por los tres escalones de honor. Lamentablemente, Jorge del Cid iba a abandonar cuando su Citroen C2 se negaba a arrancar justo antes de la ceremonia de salida, lo que le privaba de entrar en una bonita lucha con sus rivales. Alberto Monarri era el más rápido en la primera pasada por el tramo, aventajando en solo 3 segundos a Javier López, y en 10 a Manuel Manzanilla. Jordi Nualart también iba a quedar fuera de carrera con problemas de embrague tras el primer tramo.

En la segunda pasada, Manuel Manzanilla recuperaba el terreno perdido por la mañana, al marcar el mejor tiempo, por delante de Javier López, mientras que Alberto Monarri era tercero. Monarri mantenía el primer puesto, pero ahora su ventaja era de solo un segundo sobre López, y de 2 sobre Manzanilla. José Luis Peláez ocupaba la cuarta plaza, pero ya a casi dos minutos, en parte tras verse penalizado en esta segunda pasada cuando su coche quedaba empanzado en el barro, necesitando la ayuda del público para salir.

Con las espadas en alto comenzaba la tercera y última pasada por los 15 kilómetros cronometrados, donde Manuel Manzanilla no lograba mejorar sus tiempos, algo que si conseguía Alberto Monarri, que marcaba el mejor crono, logrando así la victoria, a pesar de quejarse de tener algunos problemas por las roderas dejadas por los Todo Terreno. Precisamente estas roderas iban a provocar cierto caos, quedando muchos coches empanzados, motivando el abandono de Javier López, y la neutralización del tramo. Agustín Álvaro era finalmente subía al podio, con el tiempo que le adjudicaba la organización en la última especial, mientras que José Luis Peláez, que quedó en el barro, recibía un tiempo mucho mayor tras la neutralización, y debía conformarse con la cuarta plaza, por delante de Rubén Fernández, y José Luis Priego.

Todo Terreno

Los Todo Terreno iban a ser los únicos que disputasen la complicada superespecial. Y decimos complicada no por el recorrido, si no por el estado ya de por sí bastante deteriorado del terreno, lo que unido a la fuerte tormenta que cayó durante la celebración del tramo provocaron infinidad de problemas. Enrique Bonafonte iba a imponer su Dacia Duster oficial en la Superespecial, seguido de Marc Blázquez, que recibía una penalización de 1 minuto tras retrasarse en un control horario, lo que dejaba a Blázquez algo retrasado.

Ya en la segunda jornada, Marc Blázquez arrasaba en el primer sector selectivo, pero pronto se iba a descubrir que el piloto catalán se había equivocado en un cruce, lo que le llevaba a acortar sensiblemente el recorrido. Esto iba a significar una penalización de 15 minutos al finalizar la prueba, lo que dejaba al Volkswagen Amarok de Francesc Termens como líder indiscutible tanto de la prueba, como de la categoría T1.

Marc Blázquez iba a ser de nuevo el más rápido en el segundo sector selectivo de la prueba, superando en casi dos minutos a Enrique Bonafonte, y en 2:12 a Francesc Termens. A pesar de todo, Termens se mantenía en cabeza, logrando así la victoria, por delante del penalizado Blázquez, y de un Bonafonte que había logrado su objetivo, mejorando sensiblemente sus tiempos en este segundo sector.

Sergio Lacuesta iba a ser el claro dominador en la categoría T2, logrando una aplastante victoria con su Nissan Navara, que le daba 51 minutos de ventaja sobre el Mitsubishi Montero de José de Dios, que finalizaba segundo y último clasificado de la categoría, tras los abandonos del campeón de la pasada temporada, Enrique Reyes, y Emilio Eiroa, ambos con Mitsubishi Montero.

Peor aún iba a ser el resultado en la categoría de Buggies donde tan solo un piloto, Miquel Villa iba a ser capaz de finalizar la etapa prologo, reenganchándose tanto Miguel Valero como Jordi Llamas en la jornada del domingo. En cualquier caso, ninguno de los tres pilotos iba a conseguir alcanzar la meta en el primer sector selectivo, quedando desierta la categoría en esta primera prueba de la temporada.

Firma: Asfaltoytierra